Es ley: así fue la tarde en la que con una firma se «amplió la capacidad de decidir de las mujeres»
Por: Laura Guarinoni15 de enero de 2021 00:14
Con la presencia de integrantes de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, legisladoras, funcionarios nacionales y referentes de la sociedad civil se promulgó el presidente Alberto Fernández promulgó la ley de interrupción voluntaria del embarazo.
A quince días de la histórica jornada en que se sancionó la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y la del Plan de los Mil Días, ambas fueron promulgadas este jueves durante un acto cargado de mucha emoción en el Museo del Bicentenario, en la Casa Rosada. Probablemente en un contexto no pandémico el salón hubiese estado colmado de invitadas y quizás en las calles hubiese estado acompañado la militancia, pero las autoridades optaron por un acto con poca convocatoria. Las presentes, en su mayoría las invitadas fueron mujeres, se ubicaron en sillas, distanciadas unas de otras. Las caras eran en parte las mismas que pasaron durante las largas horas en que se debatió la IVE en el Congreso en diciembre. Entre los funcionarios estaba la asesora presidencial, Dora Barrancos; la Ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires,ministra Estela Díaz; la Secretaría de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti; el Ministro de Salud de la Provincia, Daniel Gollán y la titular de Aysa, Malena Galmarini. También participaron legisladores que motorizaron la sanción como el presidente de la cámara baja, Sergio Massa, y los diputados Cecilia Moreau, Pablo Yedlin y Leandro Grosso. Fueron invitadas además algunas intregrantes de la Campaña por el derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, entre las que estaban Nelly Minyersky, Nina Brugo, Celeste Mac Dougal, Agustina Vadales Aguero y Patricia Bustamante.
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El acto que estaba programado para las 18.30, inició cerca de las 18:40, momento en que llegó al salón el presidente Alberto Fernández, acompañado de la Ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta; la Secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra; el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y el Ministro de Salud de la Nación, Ginés Gonzalez García.
Al comenzar, se proyectó un video que mostraba el recorrido de la ley, las masivas manifestaciones pidiendo que se reconozca el derecho a abortar en nuestro país y que explicaba la trascendencia de las leyes y su promulgación como un hito en la história.
La primera en tomar la palabra fue Gómez Alcorta, quien resaltó que la sanción de la IVE se logró gracias a la «alquimia imbatible compuesta por lucha y política».
La ministra reconoció que «se conjugó una larga historia de luchas de los feminismos, de miles de mujeres, del movimiento de mujeres y de la diversidad y también la decisión política de un gobierno, de su Presidente y vicepresidenta (Cristina Kirchner) por seguir ampliando derechos«.
El momento más celebrado por el público fue cuando nombró a las militantes de la Campaña y a las mujeres que dedicaron su vida a la conquista de ese derecho, muchas de ellas que ya no están como Dora Coledesky y Laura Bonaparte.
La ministra remarcó que la ley «asegurará que nunca más una mujer o una persona con capacidad de gestar muera en nuestro país producto de un aborto clandestino, pero también implicará una enorme transformación cultural, material y subjetiva, vinculada a la autonomía de los cuerpos y los deseos de las mujeres» que tienen implicancias en la vidas diarias.
Por su parte, Ibarra con la voz entrecortada de la emoción recordó a las “más de tres mil mujeres que desde que recuperamos la democracia dejaron su vida” por el aborto clandestino, y agregó por éste “las mujeres han visto afectada su salud, en esa clandestinidad muchas se han sentido humilladas, hoy venimos a reparar esto”.
La funcionaria, encargada de coordinar el equipo que redactó la ley que el ejecutivo mandó al Congreso, reflexionó: «Hasta ahora el Estado había respondido con amenazas y cárcel, con procesos penales, con clandestinidad y riesgo para la vida y la salud. A partir de hoy cambiamos de paradigma: el Estado va a recibir a las mujeres en el sistema de salud y las va a tratar con dignidad y respeto».
Sobre el final, celebró que “en un mundo, y un país, que guarda todavía muchas desigualdades de género, hayamos podido dejarle a las generaciones futuras un país un poquito más igualitario. Esas jóvenes que vemos peleando en la calle van a seguir peleando por la igualdad”.
Segundos después de terminar su discurso, en su rol de secretaria Legal y Técnica, Ibarra acercó al presidente la carpeta con los decretos de promulgación de la ley IVE, número 27.610, y del «Plan de los MIL Días”, 27.611, para que los firmara. En las pantallas de atrás se podía leer “Es Ley” en un fondo verde. El aplauso en seguida se volvió ovación, las presentes se pusieron de pie y estiraron sus pañuelos verdes. Espontáneamente se hizo un pañuelazo, quizás el Museo del Bicentenario se transformó en el escenario de último de los miles de pañuelazos que se hicieron en todo el país, durante años, reclamando por el aborto legal.
Luego fue el turno del presidente. «Cumplí con mi palabra y hoy, en tiempos en que la palabra de la política parece depreciada, es la culminación de un tiempo de lucha para muchas mujeres que lucharon para que el aborto dejara de ser un delito«, dijo en relación a su promesa de campaña electoral para que se votara la ley y el anuncio de su envío a pricipios de 2020.
«Hoy estamos haciendo una mejor sociedad; parece una frase, pero es un paso inmenso y el resultado de una lucha colectiva» y reconoció que era un «día de alegría» porque se «amplió la capacidad de decidir de las mujeres«.
Durante su discurso, el presidente habló sobre el rol de los hombres en la promoción de la igualdad y dijo estar «muy feliz de terminar con el patriarcado», con una «injusticia en siglos de la humanidad».
Celebró que a partir de hoy «la capacidad de decidir de las mujeres se amplía» e hizo hincapié en «la batalla por la igualdad de derechos de las mujeres continúa en diferentes niveles, que requieren leyes y cambios en la mentalidad».
Reconoció que se ha dado un gran paso pero recordó «queda como tarea pendiente una educación sexual suficiente para prevenir embarazos que no se quieran”. Además agradeció la construcción transversal que se hizo de la ley y destacó el rol de los opositores, entre ellos al diputado provincial por Juntos por el Cambio, Daniel Lipovetzky, quien estaba en el público con un barbijo verde y una corbata negra con líneas del mismo color.
Sobre la ley del Plan de los 1000 días, el Presidente evaluó que esa norma permitirá que las embarazadas cuenten «con un Estado detrás de ellas» para garantizarles salud y posibilidades de criar a sus hijos en los primeros tres años de vida.
«Si alguna vez una mujer tuvo el dilema de ser madre porque no sabía si podía hacer frente al costo médico que significa afrontar un embarazo, o el costo que significa darle alimentos en sus primeros años de vida a su hijo, ese dilema lo terminamos con la ley de los mil días«, dijo.
Al terminar el acto, el primer mandatario se quedó un rato charlando y tomando fotos con los invitados y luego se retiró. Las militantes de la campaña fueron las primeras en acercarse a la prensa. Se tomaron fotos con sus pañuelos y expresaron su emoción por el momento histórico que se estaba viviendo. No faltó tiempo para entonar el himno que popularizaron: “aborto legal en el hospital”. También cantaron otra canción relacionada con un hecho que se vio en los últimos días, la fuerza de la propagación de la marea verde en los países de latinoamérica a partir de que se conquistó la ley en el nuestro. En Chile comenzó esta semana a debatirse la despenalización del aborto después de la semana 14. “América Latina va a ser toda feminista”, se escuchó en el subsuelo de la Casa Rosada pero se trata de un grito que cruza fronteras.
Una de las funcionarias más eufóricas fue Barrancos quien aseguró que estaba “emocionadisima” y se definió entre risas en un “estado de derrame y de incontinencia”. “Tengo la impresión que todavía no podemos medir la trascendencia, la historicidad que nutre esta ley. Lo tan anhelado una vez que coagula es inesperado de lo tan conmocionante que es”.
La asesora presidencial contó a este medio que en el último tiempo piensó y evocó a “las miles y miles de muchachas jóvenes que murieron. La ley era una pena de muerte larvada”.
En la misma línea, la ministra Diaz dijo que era “un día de enormes emociones” y que “constantemente entre las compañeras nos tenemos que repetir que es ley porque parece increíble. Desde el 30, día en que se dio la sanción de la ley sabíamos que estábamos en una conquista histórica, de un derecho tan largamente restringido a para las mujeres”. Además, resaltó que no se trata de un tema de salud pública únicamente sino que “es un tema de igualdad, como dijo el Presidente, y sentimos que hicimos saltos en la historia”.
Por su parte, Lipovesky resaltó como desafío a futuro que se aplique la ley de Educación Sexual Integral en todo el país. “En el 2018 incluimos en el proyecto algunos artículos para mejorarla pero finalmente el senado la rechazó. Es clave la prevención del embarazo no deseado y es uno de los temas a seguir trabajando”.
Pese a que el verde era el color oficial del evento, en esta oportunidad, Malena Galmarini abandonó su traje que la había acompañado como cábala en las dos jornadas de sanción de la ley y lucía un vestido blanco con flores fucsias con un blazer haciendo juego. Tenía un motivo. Explicó a la prensa que decidió llevar solo el pañuelo en su muñeca porque “terminó una etapa». “La bandera verde que tenía que ver con sancionar esta ley ya está. Ahora debe cambiarse por otro color, hay que volver al violeta. El colectivo de mujeres debe juntarse. Nos cuesta tanto avanzar que luego nos relajamos y el patriarcado avanza. Hay que seguir en la conquista de los derechos de las mujeres”.
Con la promulgación de la IVE se pone fin a una legislación vigente desde 1921. Con la nueva normativa las mujeres podrán interrumpir un embarazo hasta la semana 14 y el sistema de salud pública deberá garantizar la cobertura de la intervención de manera gratuita. La ley entrará en vigencia nueve días después de su publicación en el Boletín Oficial. Sin dudas, se abrirá una nueva etapa en la vida de millones de personas con capacidad de gestar que tendrán la libertad de decidir sobre sus propios cuerpos acompañadas por el Estado.